Este primer anuncio lo han expuesto Juan, Yaiza Esther y Christian. Han destacado la habilidad que ha tenido el anuncio para intentar que colaboremos con niños y a niñas para que puedan comer. Hemos comentado en clase que el anuncio nos provoca que nos pongamos con facilidad en el lugar de esa madre y esa niña, para que en menos de un minuto podamos sentir lo que puede sentir una familia así.
El segundo lo ha expuesto Elena. Lo ha seleccionado porque además de anunciar una red de internet, porque es divertido y gracioso ya que en vez de personas han buscado bichos raros. A pesar de estar hecho con sentido del humor, pensamos que es un anuncio machista ya que son los hombres los que están en la cocina, pero no haciendo labores domésticas, mientras la mujer está comprando.
El tercer anuncio lo han propuesto Efrain y Dani Román ya que les ha llamado la atención que al niño, a pesar de que parece que tiene dinero, le regalen sólo un palo y que encima se ponga como si le hubieran regalado "lo más guapo del mundo". Piensan que ha preferido el palo porque es lo más sencillo.
De todas formas no entienden la actitud del niño, ya que preferimos una Play, una tablet, una X-Box, un balón, un tanque de juguete que tira bolas, antes que un palo.
Podemos estar de acuerdo que a veces en lo simple está la clave. Por ejemplo, Javier alguna vez en lugar de jugar con el coche regalado se quedó jugando con la caja. A Aimara le regalaron una lámpara para su mesita, y prefirió quedarse jugando con el plástico de las "burbujitas". A Christian le pasó igual con la caja de un juguete, que lo convirtió en un fuerte. Claudia hacía lo mismo con las cajas de las botellas de aceite o con la caja de las televisiones, haciendo habitaciones para construir una casa para jugar. A Miguel le regalaron una caja de muñecos de Goku, en lugar de jugar con estos muñecos, recortó las figuras de papel que venían en el catálogo y jugó con ellas.
A Esther le regalaron una caravana de Patito, y se quedó jugando con la caja. Juan, con las cajas de los muebles de Ikea se construyó una diana. Efrain con las cajas de su ordenador hacia cohetes. Marta y Javier con los restos de la caja de un pedido de su madre construyeron un coche.
